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Justin Trudeau advierte de la incertidumbre que supondría para Canadá una victoria de Donald Trump
El Primer Ministro canadiense, Justin Trudeau, expresó este martes que una eventual victoria del republicano Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos en noviembre generarían un escenario de imprevisibilidad para Canadá, recordando las tensiones pasadas con el expresidente.
Trudeau, quien tuvo una relación tensa con Trump, recordó que en 2018, el entonces presidente acusó al primer ministro canadiense de ser débil y deshonesto. Ante la incertidumbre de un posible regreso de Trump, Trudeau comentó a periodistas en Montreal: “No sabemos exactamente lo que hará (…) obviamente, el señor Trump representa una cierta cantidad de imprevisibilidad”.
Canadá, que envía el 75% de sus exportaciones de bienes y servicios a Estados Unidos, se encuentra en una posición particularmente vulnerable ante cualquier cambio hacia el proteccionismo por parte de su vecino del sur.
Trudeau destacó que su gobierno logró superar los desafíos planteados durante el mandato de Trump, como los aranceles impuestos al acero canadiense y la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que también involucró a México.
Durante las negociaciones del TLCAN, Canadá adoptó una estrategia de alto perfil, enviando ministros y funcionarios a estados clave de Estados Unidos para resaltar los beneficios del libre comercio continental. Trudeau aseguró que seguirían con la misma táctica si es necesario.
“Pudimos manejar al señor Trump defendiendo los intereses canadienses y demostrando que podemos crear crecimiento económico a ambos lados de la frontera”, afirmó Trudeau.
En cuanto a las recientes victorias de Trump en los caucus de Iowa, el primer ministro canadiense comentó que el pasado 16 de enero, el expresidente ganó con el 51% de los votos, consolidándose como el favorito en el proceso interno republicano. Por su parte, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, retirándose de las primarias, expresó su apoyo a Trump para evitar el regreso de “la vieja guardia republicana”, representada, según él, por Nikki Haley.
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