Tras dos años de ausencia, se confirma el regreso de los flamencos a la isla de Cozumel la consolida como un refugio clave para la avifauna y resaltando la buena salud ambiental de los humedales y la calidad del ecosistema en la Reserva Ecológica Estatal Laguna Colombia, de Punta Sur.
La presencia de flamencos caribeños (Phoenicopterus ruber) anillado DXZZ en un hábitat es un indicador de la estabilidad del ecosistema, pues requieren cuerpos de agua con ciertas características específicas para alimentarse y reproducirse.
“Rube”: un testigo del equilibrio ecológico
El ejemplar DXZZ, de 25 años de edad, fue anillado por el proyecto FlamencoLab, de la Fundación Pedro y Elena A.C., en la Península de Yucatán y registrado por primera vez en Laguna Colombia en el año 2000, desde entonces, ha sido avistado en múltiples ocasiones en Punta Sur.
Monitoreo constante para la conservación y regreso de los flamencos
Desde el año 2000, la Fundación de Parques y Museos de Cozumel (FPMC) ha desarrollado un programa de registro, observación y monitoreo de flamencos en los complejos lagunares, lo que ha permitido documentar la llegada recurrente de estos ejemplares, un claro indicador del equilibrio ecológico de la reserva.
El equipo de monitoreo de la FPMC ha bautizado internamente al ejemplar DXZZ como “Rube”, en honor a Rubén Ademar Méndez Martín, guía especializado en turismo de naturaleza de la FPMC, reconocido por su dedicación en la identificación y monitoreo de estas aves emblemáticas.
La directora general de la FPMC, Juanita Alonso Marrufo, destacó que estos resultados reflejan el compromiso de la institución con la conservación y restauración de los ecosistemas bajo su resguardo, alineados con el Nuevo Acuerdo por el Bienestar y Desarrollo de Quintana Roo, impulsado por la gobernadora Mara Lezama Espinosa.
Un esfuerzo conjunto por la biodiversidad
El director de Punta Sur, Jesús Benavides Andrade, mencionó que el avistamiento de este ejemplar fue registrado por el biólogo y subdirector del parque, Héctor González Cortés, quien junto con su equipo trabaja activamente en la preservación del ecosistema.
El regreso de “Rube” y otros flamencos no solo es motivo de celebración, sino una prueba tangible de que los ecosistemas de Punta Sur mantienen las condiciones óptimas para la biodiversidad.
Este hecho resalta la necesidad de continuar con las estrategias de preservación que garanticen la permanencia de estas especies en la isla, es clave para asegurar que Laguna Colombia siga siendo un santuario natural para los flamencos y muchas otras especies.
El compromiso de las autoridades ambientales y la comunidad
Su retorno a inicios de 2025, junto con grupos de hasta 30 ejemplares, reafirma la importancia del área como sitio de descanso y alimentación para los flamencos en su ruta migratoria.