Política
Ocho ministros de la Suprema Corte de Justicia presentan renuncia al Senado
Gerardo Fernández Noroña, presidente del Senado, informó la recepción de las renuncias de ocho ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), quienes declinaron participar en la elección judicial de 2025 y dejarán sus cargos en agosto de ese año.
A través de redes sociales, el presidente del Senado expresó su opinión sobre la renuncia de los ministros, pidiéndoles que escribieran su nombre en los documentos y llamándolos “bellacos”, salvo a Alberto Pérez Dayán y José Luis González Alcántara Carrancá, a quienes excluyó de este comentario. “Les voy a decir, escriban mi nombre, bellacos”, publicó Fernández Noroña.
El martes pasado, Fernández Noroña aseguró que hasta ese momento no se había recibido ninguna notificación oficial de renuncia, aunque luego confirmó la llegada de los documentos correspondientes al Senado. Las renuncias son de Norma Lucía Piña, Luis María Aguilar, Jorge Mario Pardo, Javier Laynez, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Margarita Ríos Farjat y Juan Luis González Alcántara Carrancá, quienes han decidido no participar en el proceso electoral del Poder Judicial previsto para 2025.
Según declaró el presidente de la Mesa Directiva, algunos ministros presentaron sus renuncias o declinaciones el martes pasado, especificando que el caso de González Alcántara Carrancá fue una reflexión política más que una renuncia directa. Este también destacó el caso de la ministra Ríos Farjat, quien habría renunciado a ciertos haberes en su documento de salida.
Tras estas renuncias, tanto Fernández Noroña como el coordinador de Morena en el Senado, Ricardo Monreal, adelantaron que podrían no aceptar las renuncias de inmediato. Fernández Noroña mencionó que el Senado esperará a que la SCJN decida sobre la validez de la reforma judicial antes de tomar una resolución final.
Además, Fernández Noroña comentó sobre la coincidencia de fechas, señalando que la decisión de la Corte sobre la reforma judicial se discutirá el próximo martes, el mismo día de la elección presidencial en Estados Unidos. “No deja de llamarme la atención la feliz coincidencia que es el día de la elección del presidente de Estados Unidos”, indicó.
Ministros renunciantes y el proceso de la reforma judicial
En una sesión reciente, siete ministros de la SCJN anunciaron su decisión de no participar en la elección judicial de 2025, dejando sus cargos en agosto de ese año. Las renuncias fueron comunicadas oficialmente esta mañana al Senado, siendo efectivas a partir del 31 de agosto de 2025, de acuerdo con las disposiciones de la reforma judicial. Los ministros que presentaron su renuncia son: Norma Lucía Piña Hernández, Luis María Aguilar Morales, Jorge Mario Pardo Rebolledo, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Alberto Pérez Dayán, Javier Laynez Potisek, Juan Luis González Alcántara Carrancá y Ana Margarita Ríos Farjat.
En días previos, el ministro Juan Luis González Alcántara Carrancá propuso invalidar la elección popular de jueces y magistrados, dejando intacta la selección de ministros bajo este método. Su proyecto busca invalidar la figura de “jueces sin rostro” y el método de selección de candidatos a cargos judiciales.
La reforma judicial: objetivos y transformaciones
La reforma judicial tiene como objetivo modernizar el sistema de justicia en México, buscando agilizar los procesos y hacerlos más accesibles a la población, respondiendo a las demandas de la sociedad mexicana por una justicia más rápida y justa. Esta iniciativa plantea cambios como la digitalización de la justicia y la capacitación de los operadores judiciales en diversas lenguas para eliminar barreras de acceso.
Además, la reforma propone una renovación profunda en el Poder Judicial para erradicar prácticas de corrupción, nepotismo y clientelismo. También subraya la importancia de promover la paridad de género y proteger los derechos de las mujeres que trabajan en el sistema judicial, especialmente en casos de acoso laboral y otras formas de violencia.
La reforma judicial, en términos generales, busca una justicia equitativa y de calidad, orientada especialmente hacia la población más vulnerable.
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