La victoria de Sainz marca un hito para Ferrari, mientras Checo Pérez sufre una de sus peores actuaciones en casa.
El dominio de Red Bull parece tambalearse, y la más reciente prueba de ello se vivió en el Gran Premio de la Ciudad de México. En un escenario que evocaba un imperio en decadencia, el equipo de Milton Keynes perdió terreno que podría considerarse local, siendo Ferrari el responsable de una estocada que podría resultar fatal. Carlos Sainz Jr. vivió una jornada memorable al conquistar su primera victoria en este evento, marcando la primera vez que el Cavallino Rampante se impone en el Autódromo Hermanos Rodríguez desde 1990. Además, logró un doblete al finalizar en el 1-3 junto a su compañero Charles Leclerc, superando a los austriacos en la tabla de constructores.
La situación para Red Bull se complicó aún más cuando Sergio Pérez, quien había comenzado la carrera con esperanzas, no pudo recuperar posiciones como lo hizo en el Gran Premio de Sakhir en 2020. A pesar de una buena salida, los problemas de la temporada lo persiguieron en su carrera en casa, y su mejor resultado fue un undécimo lugar. Con su decimoséptimo puesto, Pérez registró su actuación más baja en México, sin contar los abandonos de 2018 y 2023.
Por su parte, Max Verstappen no tuvo una actuación tan negativa como se podría pensar. Finalizó en el sexto lugar, sumando puntos que no permitieron un avance significativo de Lando Norris, quien completó el podio en el Hermanos Rodríguez. Aunque McLaren mostró un mejor rendimiento, la victoria de Sainz y su segundo puesto no representan una amenaza inmediata para el campeonato de pilotos, lo que le permite a Red Bull sobrevivir una fecha más y seguir acercándose al cuarto campeonato consecutivo de Verstappen.
La carrera comenzó con gran emoción en la salida, la más larga del calendario de la Fórmula 1, y no decepcionó. En la curva 1, Verstappen realizó un espectacular rebase sobre Sainz, pero no fue la única acción dramática. Yuki Tsunoda y Alex Albon se vieron involucrados en un choque que terminó con el japonés impactando contra el muro de contención, mientras que el tailandés se retiró en la zona del DRS. Fernando Alonso también tuvo que abandonar tras 15 vueltas por problemas mecánicos en su Aston Martin, marcando su tercer abandono consecutivo.
El safety car entró en acción tras seis vueltas, lo que permitió a Verstappen resistir la presión de Sainz, quien recuperó el primer lugar en el noveno giro, aprovechando la segunda zona de DRS. La carrera continuó con más complicaciones para Red Bull, ya que Verstappen recibió una penalización de 20 segundos por dejar sin pista a Norris y por un rebase fuera de los límites. Esto lo obligó a una detención en boxes que le costó tiempo valioso y lo relegó a la parte media del pelotón.
Mientras Norris intentaba sumar más puntos, Sainz mantenía su ventaja. Finalmente, en la vuelta 63, Norris superó a Leclerc, pero la ventaja que había acumulado Sainz desde el principio le garantizó la victoria y su segundo triunfo del año, luego de su éxito en Australia.
Para Carlos Sainz, quien en 2015 había quedado maravillado con la Ciudad de México durante un Show Run como piloto de Toro Rosso, este triunfo simboliza su consagración como uno de los pilotos más subestimados en la Fórmula 1. No solo acaba con una sequía de 34 años para Ferrari en este circuito, sino que podría ser una de sus últimas oportunidades con el equipo, ya que se rumorea su inminente traslado a Williams en 2025.
Te puede interesar:
