Quintana Roo
Niveles de sargazo en playas de Quintana Roo mantienen tendencia a la baja al concluir temporada
Descenso del Sargazo en Quintana Roo: Temporada de Recale Finaliza con Menos Impacto
A medida que se acerca el cierre de la temporada de sargazo en el Caribe, los niveles de acumulación de esta alga en las playas de Quintana Roo muestran una tendencia a la baja, en contraste con los fuertes arribos experimentados en años anteriores.
En una notoria excepción a los últimos cinco años, el sargazo ha dejado de llegar en grandes volúmenes a las costas de Quintana Roo antes de la fecha típica de septiembre. Este fenómeno, que históricamente ha generado preocupación en entidades gubernamentales y organizaciones civiles debido a sus impactos económicos y ecológicos, está tomando un giro positivo esta vez.
El más reciente informe de monitoreo de sargazo por parte de la Secretaría de Marina Armada de México (Semar), que abarca las costas del Caribe mexicano, señala que la acumulación de esta macroalga ha mantenido una tendencia decreciente en los días previos a septiembre, cuando se marca el final de la temporada de arribo masivo.
Los datos hasta ahora indican que se ha recolectado un total de 112,363 toneladas de sargazo a lo largo de la costa quintanarroense. Esta cifra contrasta con las 287,405 toneladas recolectadas oficialmente en 2022, reflejando una disminución de más del 50% en comparación con el año pasado.
El informe es elaborado por el Instituto Oceanográfico del Golfo y Mar Caribe, parte de la Semar. Según el último modelo, el nivel de alerta para la región del Caribe mexicano se encuentra en la categoría 4, lo que se considera moderado.
Los niveles de acumulación de sargazo en las distintas áreas de playas de Quintana Roo, según el monitoreo de Semar, son los siguientes:
- Bajo desde Xcalak hasta la Reserva de la Biósfera de Sian Ka’an.
- Bajo a moderado desde Tulum a Playa del Carmen y Cozumel.
- Escaso a bajo desde Puerto Morelos a Cancún e Isla Mujeres.
La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) también contribuye al monitoreo, utilizando imágenes del satélite Sentinel 2. Según datos obtenidos el 14 de agosto, no se han detectado concentraciones significativas de macroalga en la región.