El conflicto generado por la plaga del gusano barrenador ha escalado a un nuevo nivel entre México y Estados Unidos. ¿Qué implicaciones tiene esta situación para el comercio y la cooperación internacional? A continuación, te presentamos toda la información clave, las declaraciones oficiales, los datos duros y el panorama actual.
Contexto de la alerta por el gusano barrenador
El gusano barrenador (Cochliomyia hominivorax), una plaga altamente peligrosa para el ganado, ha sido motivo de alarma tanto en México como en Estados Unidos. La detección de casos recientes, especialmente en la frontera sur mexicana, llevó a Estados Unidos a emitir una advertencia y a tomar acciones drásticas para proteger su industria agropecuaria.
En noviembre pasado, EE.UU. pausó la importación de ganado mexicano debido a la presencia del gusano barrenador, reanudándola posteriormente en febrero. Sin embargo, la persistencia del problema ha vuelto a tensar la relación comercial entre ambas naciones.
Declaraciones del secretario de Agricultura, Julio Berdegué
Frente a las exigencias de Estados Unidos, el secretario de Agricultura y Desarrollo Rural, Julio Berdegué, aseguró que México no se subordina ante presiones extranjeras.
“Como ha dicho nuestra presidenta, Claudia Sheinbaum, actuamos con la cabeza fría, colaboramos, cooperamos, pero nunca nos subordinamos”, afirmó Berdegué en sus redes sociales.
El funcionario confirmó haber respondido puntualmente la carta enviada por su homóloga estadounidense, Brooke Rollins, aunque no reveló detalles del contenido de su respuesta.
¿Qué exigió Estados Unidos a México?
La secretaria de Agricultura de EE.UU., Brooke Rollins, solicitó que México:
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Permita el despliegue completo de aviones contratados por el Departamento de Agricultura (USDA) para realizar operaciones de combate aéreo contra el gusano barrenador.
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Elimine restricciones a las aeronaves estadounidenses que operan en territorio mexicano.
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Exima de cuotas aduanales al equipo de erradicación de plagas que necesita ingresar a México.
Además, Rollins advirtió que, de no resolverse estos puntos antes del miércoles 30 de abril, el USDA impondría restricciones a la importación de productos animales provenientes de México, afectando a ganado bovino y equino.
Impacto económico y comercial para México
La amenaza de nuevas restricciones comerciales llega en un momento delicado. Durante el ciclo 2023-2024, México incrementó sus exportaciones de ganado en un 37.8 %, alcanzando un total de 1.3 millones de cabezas, de acuerdo con datos del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica).
Además, el país ya enfrenta aranceles del 25 % en exportaciones de productos como acero, aluminio, automóviles, cerveza enlatada y otros bienes fuera del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Las restricciones adicionales a la exportación de ganado podrían impactar gravemente a los productores nacionales, especialmente en estados fronterizos como Chihuahua, Sonora y Coahuila, donde se concentra buena parte de la producción ganadera de exportación.
Afectaciones en la salud pública: el caso de Chiapas
La gravedad de la plaga también se refleja en el ámbito de la salud pública. Hace dos semanas, se reportó el caso de una mujer de 77 años en el estado de Chiapas que falleció a causa de una infección de miasis provocada por el gusano barrenador. Este hecho subraya la necesidad urgente de acciones coordinadas para controlar la propagación de la plaga.
¿Cómo podría evolucionar la situación?
Aunque el tono de las comunicaciones ha sido firme, Julio Berdegué expresó optimismo sobre una solución negociada:
“Estoy seguro de que llegaremos a buenos acuerdos”, afirmó el secretario de Agricultura.
México busca equilibrar la cooperación técnica con la defensa de su soberanía, sin ceder ante imposiciones externas. Mientras tanto, el diálogo diplomático y la negociación técnica entre ambos países continuarán en los próximos días.
Firmeza y cooperación sin subordinación
La postura del gobierno mexicano ante la alerta por el gusano barrenador reafirma el compromiso de actuar de forma cooperativa pero soberana. Aunque existen riesgos comerciales y sanitarios, México prioriza la defensa de su autonomía mientras busca soluciones efectivas para proteger tanto al sector ganadero como a la población afectada.