García Luna es trasladado a un penal de alta seguridad en Virginia

El exfuncionario mexicano fue trasladado a un penal en Virginia, en medio de denuncias sobre violencia y racismo en la prisión.

Genaro García Luna, exsecretario de Seguridad Pública de México, ha sido ingresado en la Penitenciaría de Alta Seguridad del condado de Lee, Virginia, donde cumplirá una condena de más de 38 años por cargos relacionados con recibir sobornos del Cártel de Sinaloa. Según el Buró Federal de Prisiones (BOP, por sus siglas en inglés), su liberación está programada para el 8 de agosto de 2052.

El penal donde se encuentra recluido es una instalación de máxima seguridad que alberga a más de mil 400 internos, todos hombres. Actualmente, las visitas han sido suspendidas en su totalidad, según informaron las autoridades penitenciarias. Sin embargo, este lugar ha sido objeto de múltiples denuncias, como lo reportaron The Marshall Project y la Radio Pública Nacional (NPR) de Estados Unidos. Estas organizaciones han señalado un ambiente de racismo y violencia dentro de la prisión, con testimonios que acusan a los guardias de propinar golpizas a internos en áreas de confinamiento solitario.

A sus 56 años, García Luna enfrenta esta etapa de su vida en prisión mientras su defensa legal continúa buscando revertir la sentencia que le fue impuesta en octubre pasado por el juez Brian Cogan. En su apelación, argumentan que los testimonios presentados en su contra, provenientes de exmiembros del Cártel de Sinaloa, los hermanos Beltrán Leyva y el Cártel del Milenio, son falsos.

El juez Cogan, al dictar la sentencia, aceptó recomendar que García Luna fuera trasladado a una prisión en Virginia, para que estuviera cerca de su familia, que reside en ese estado. Antes de su reclusión en este penal, el exfuncionario permaneció en el Centro Metropolitano de Detención en Brooklyn, Nueva York, durante el desarrollo de su juicio y posterior condena.

Durante la audiencia, el juez Cogan describió a García Luna como alguien que llevó una “doble vida” y lo comparó con figuras del crimen organizado como Joaquín “El Chapo” Guzmán. “Usted es, por su conducta y su forma de hablar, alguien con un tipo criminal como el de El Chapo (…) tenía una doble vida”, declaró el magistrado al momento de emitir la condena.

Este caso, que ha sido uno de los más mediáticos en relación con altos funcionarios mexicanos, sigue generando atención, no solo por su impacto en las relaciones bilaterales entre México y Estados Unidos, sino también por las condiciones que enfrenta García Luna en prisión y las implicaciones legales que podrían derivarse de su apelación en curso.