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Detenido por el asesinato del CEO de UnitedHealthcare recibe más de 31 mil dólares en donaciones para su defensa
La recaudación de fondos y la creciente polémica en torno a Luigi Mangione reflejan la frustración de muchos con el sistema de salud estadounidense.
En los días posteriores al asesinato del CEO de UnitedHealthcare, Brian Thompson, ocurrido el 4 de diciembre en Manhattan, Luigi Mangione, el acusado de este crimen, ha captado la atención pública de manera alarmante. A pesar de ser acusado de asesinato por el tiroteo que acabó con la vida del alto ejecutivo, Mangione ha recibido un apoyo inesperado, con más de mil donaciones que superan los 31 mil dólares en una campaña en línea para financiar su defensa legal.
El crimen, ocurrido antes de una conferencia del sector de la salud, desató una persecución de varios días hasta que el joven de 26 años fue arrestado. Sin embargo, en las redes sociales, Mangione se ha transformado en una figura controvertida que algunos consideran un héroe. Carteles de “Se busca” con los rostros de directores ejecutivos han aparecido en las calles de Nueva York, mientras que en internet circulan productos de Mangione, incluidos artículos como gorras con la frase “Cazador de CEO”. Además, ciertos usuarios se han mostrado fascinados por su imagen, destacando incluso su atractivo físico.
A pesar de la condena generalizada por su acto violento, Mangione se ha ganado el apoyo de sectores de la población que, en su mayoría, expresan su frustración con el sistema de salud de Estados Unidos. En particular, algunos donantes consideran que el asesinato fue “justificable”, vinculado a una profunda indignación sobre la negación de cobertura sanitaria por parte de las aseguradoras. Mensajes como “Negar la cobertura es un asesinato” o “Homicidio justificable” han sido compartidos en las plataformas de recaudación de fondos, como GiveSendGo, donde se ha recaudado más de 31 mil dólares hasta la fecha.
El exsargento detective de la policía de Nueva York, Felipe Rodríguez, se mostró desconcertado ante la respuesta pública, señalando que, aunque muchas personas han enfrentado problemas con sus seguros, eso no justifica un asesinato. A pesar de esto, algunos continúan viéndolo como un símbolo de resistencia contra lo que perciben como la avaricia de las grandes corporaciones, especialmente en un contexto donde el costo de la atención médica es un tema candente en el país.
Mangione, quien se encuentra detenido en Pensilvania por cargos adicionales, incluidos la posesión ilegal de armas y falsificación, también enfrenta la acusación de asesinato en primer grado por la muerte de Thompson. Las autoridades de Nueva York están trabajando en su extradición mientras continúan recopilando pruebas, incluidas huellas dactilares y documentos escritos por Mangione en los que expresa que sus acciones fueron una respuesta legítima ante lo que consideraba “avaricia empresarial”.
El caso sigue siendo una mezcla inquietante de condena y admiración, un fenómeno que resalta las tensiones sociales y económicas en torno al sistema de salud de Estados Unidos. Mientras las aseguradoras continúan siendo criticadas por su control sobre los servicios médicos, la figura de Mangione se convierte en un símbolo para algunos y un ejemplo de las complejidades que surgen cuando los problemas estructurales del país se combinan con un acto de violencia.
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