Policíaca
Agresión brutal en Playa del Carmen: padrastro golpea a dos menores de edad
Un violento ataque en la colonia Ejido deja a dos menores heridos; el agresor está prófugo y la madre denuncia omisión de las autoridades.
Una escena aterradora sacudió la colonia Ejido de Playa del Carmen cuando Francisco Javier, de 33 años, agredió violentamente a sus hijastros, dejando a uno de ellos con lesiones graves que pusieron en riesgo su vida. El ataque, que ocurrió tras una discusión aparentemente trivial, conmocionó a la comunidad y evidenció la falta de acción previa de las autoridades frente a las denuncias de violencia familiar.
El detonante de una tragedia
Según narraron testigos, la furia de Francisco Javier se desató porque su hijastro, un niño de 12 años, había sacado al perro sin su permiso. Este hecho trivial desencadenó un ataque brutal en el que el hombre golpeó al menor y lo azotó contra el suelo repetidas veces.
La hermana del niño, una adolescente de 14 años, intentó defenderlo, pero también fue víctima del agresor, quien la golpeó con un tubo de PVC. Ambos menores quedaron con heridas significativas tras el violento altercado.
Heridos y hospitalización
Tras el ataque, los niños fueron trasladados de emergencia al Hospital General de Zona No. 18 del IMSS. El niño de 12 años sufrió lesiones graves, incluyendo una posible fractura en la órbita ocular, además de daños en el tobillo y la rodilla. Por su parte, la hermana fue atendida y dada de alta horas después, aunque necesitará medicamentos y controles médicos constantes para su recuperación.
El agresor prófugo y denuncia previa
Francisco Javier huyó del lugar inmediatamente después del incidente para evitar ser arrestado por las autoridades. La madre de los menores, identificada como Deysi, reveló que ya había interpuesto una denuncia por violencia familiar en la Fiscalía General del Estado contra su pareja, pero las autoridades no tomaron acción alguna para proteger a los niños o prevenir nuevos actos violentos.
Indignación y llamado a la justicia
Este caso ha generado indignación entre los vecinos y la comunidad en general, quienes exigen una respuesta inmediata de las autoridades para detener al agresor y garantizar la seguridad de los menores. La omisión previa de las instituciones encargadas de atender la denuncia agrava la situación y pone en el centro del debate la falta de mecanismos efectivos para prevenir la violencia familiar.
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